La defensa de los Derechos Humanos y el derecho a vivir de la sociedad civil en el conflicto entre Israel y Palestina en Oriente Próximo es un imperativo moral y legal que debe ser prioritario para la comunidad internacional. Este conflicto de larga duración ha generado un sufrimiento humano inmenso, con pérdidas de vidas, desplazamientos forzados y una escalada de violencia que afecta profundamente a las poblaciones de ambas partes.

Es fundamental que se respeten los Derechos Humanos de todas las personas involucradas en este conflicto, independientemente de su origen étnico, religión o nacionalidad. Esto incluye el derecho a la vida, la integridad física y la dignidad. La violencia y las acciones que ponen en peligro la vida de civiles, ya sea por parte de actores estatales o no estatales, deben ser condenadas y perseguidas de acuerdo con el derecho internacional.

Asimismo, es esencial que se promueva el respeto por el derecho internacional humanitario, que establece reglas específicas para proteger a las personas no involucradas en el conflicto, como los civiles y los trabajadores humanitarios. El acceso a la ayuda humanitaria debe ser garantizado para aquellos que la necesitan desesperadamente.

La resolución pacífica de este conflicto es una necesidad imperante. Esto implica la negociación de un acuerdo justo y duradero. La comunidad internacional, en particular, los mediadores y observadores imparciales, deben desempeñar un papel activo en la búsqueda de una solución sostenible.

La sociedad civil tiene un papel fundamental en la promoción de la paz y la defensa de los derechos humanos en esta región. La conciencia global y la presión pública pueden influir en los actores involucrados en el conflicto y fomentar la rendición de cuentas por las violaciones de derechos humanos. Además, es esencial que se respete el derecho a la libertad de expresión y la participación activa de la sociedad civil en la búsqueda de soluciones pacíficas y justas.

En resumen, desde La Liga Iberoamericana que la defensa de los Derechos Humanos y el derecho a vivir de la sociedad civil en el conflicto de Israel y Palestina es crucial para lograr una paz duradera en Oriente Próximo. La comunidad internacional debe trabajar de manera conjunta para promover la justicia, la seguridad y el respeto de los derechos de todas las personas afectadas por este conflicto.