Diciembre 2020. Este año 2020 ha sido un año duro, con la llegada de una pandemia en marzo, que nadie se esperaba y que nos ha hecho cambiar nuestros hábitos de vida de manera extraordinaria. Nos hemos tenido que adaptar a vivir de forma diferente, trabajar de forma diferente, relacionarnos con nuestros seres queridos de forma distinta: se han incrementado más aun todos los desafíos, con los que ya veníamos trabajando.

Del 2020 nos llevamos muchos aprendizajes nuevos, al respecto de algunos temas, que nos debieran servir para el 2021, y en general para siempre, en base a algunas reflexiones:

1) Los DDHH más que nunca, deben ser «peleados», reivindicados, de forma constante e incansable,. Ya sabemos que su ejercicio tienen mucha debilidad, y que sin seguir trabajando duro, no serán una realidad, especialmente para quienes les afectan vulnerabilidades en términos de:  igualdad de género,  educación ,  origen, etc.

2) La situación de pobreza sigue siendo un riesgo y una realidad horrible para muchas personas en la región, no tener un empleo, no tener un techo, no disponer de alimentación o no disponer de lo básico, ha ido en aumento en la pandemia. Mejorar la vida de las personas  más vulneradas es un gran reto y consensuamos que hace falta un NUEVO PACTO SOCIAL.

3) Las políticas públicas que mejoren la vida de las personas tienen que ser el centro, para la supervivencia justa de nuestras sociedades, sin estados responsables, y sin OSC que trabajen para lograr superar las brechas, junto con otros, no es posible flanquear la huella de la pandemia con equidad, y tener sociedades más igualitarias y justas. Las OSC cobran rol central, y merecen reconocimiento.

4) La tecnología, el acceso y el manejo se ha hecho crucial, para sortear un poco las brechas de la pandemia, sin saber usar la tecnología, para la vida, para el trabajo, para las relaciones sociales, las exclusiones son mucho mayores en todos los niveles.

5) Trabajar cohesionadas como red: seguir en contacto, lograr espacios de cohesión y comunicación fue posible, aunque complejo, pero nos adaptamos al reto, y logramos seguir articuladas y tener un proyecto para el 2021, en el marco de La Liga Iberoamericana.

Con todos los retos, con todos los aprendizajes, esperamos pasar unas fiestas distintas, complejas, pero iniciar de forma optimista y con esperanza el 2021, no puede ser de otra manera, porque juntas hacemos cosas que solas no podemos.